Contratar a una niñera o cuidador por primera vez es algo muy importante para los padres. Una vez que hayas encontrado en quien confíes para que cuide a tu bebé mientras no estás, tu siguiente tarea será presentar a tu hijo. Su respuesta a un nuevo cuidador depende de varios factores, incluyendo sus experiencias previas con extraños, su temperamento y la ansiedad por la separación. Independientemente de cómo preveas que reaccionará tu pequeño, hay medidas que puedes tomar para facilitarle el acceso al nuevo territorio del cuidador.
Aquí algunos consejos para que todo sea más fácil
1. Nombra a la persona antes de la primera reunión
Antes de que el nuevo cuidador de tu niño se reúna con él por primera vez, trata de incluir su nombre en las conversaciones diarias tanto como sea posible, especialmente con los niños pequeños:
- Vas a conocer a nuestra nueva amiga Lisa esta semana, ¿no estás emocionado?
- ¡Lisa también ama los libros! Apuesto a que querrá leer algunos contigo.
- Lisa es muy buena construyendo con bloques. Te enseñará cuando te visite.
Hable sobre el aspecto de la nueva cuidadora, lo amable que es y lo mucho que le gusta a todos a su alrededor. Esto ayuda a los pequeños a sentirse más cómodos con la idea de estar cerca de alguien nuevo.
2. Organiza una reunión de bienvenida
Especialmente si es la primera vez que tu bebé o niño pequeño es atendido por alguien nuevo, es útil tener una sesión introductoria un día o dos antes de la primera vez que tu niño esté solo con el nuevo cuidador. Invita al cuidador a pasar al menos una hora con tu niño. Esta visita inicial beneficia a todos los involucrados. Le ofrece a tu niño la oportunidad de pasar un tiempo de calidad con la nueva niñera y a la vez sentirse seguro contigo cerca. Tienes la oportunidad de observar sus interacciones y de ofrecer consejos útiles. También te permite discutir detalles que facilitarán el trabajo de la cuidadora (su juguete favorito, la mejor manera de tranquilizar al niño, los alimentos que no le gustan, las horas de siesta programadas, etc.).
3. Involucra a tu niño
Los niños pequeños pueden estar más abiertos a un nuevo cuidador si se sienten seguros y en control. Cuando tu nueva niñera llegue para una reunión de bienvenida, haz que tu niño pequeño participe en el proceso. Permítele que le muestre a la niñera sus juguetes, que le diga los nombres de sus peluches o que le muestre a su nueva amiga su habitación. Para aumentar su entusiasmo por el primer encuentro, pídele a tu niño que haga un dibujo o una señal de bienvenida. Esto no solo establece un tono positivo al conocerse, sino que también ayuda a tu niño a sentirse más seguro de sí mismo.
4. Planea una actividad para el gran día
Tener una actividad planificada para la primera vez que tu niño esté solo con un nuevo cuidador puede ser una distracción saludable. Aproximadamente una hora antes de que llegue la niñera, dile a tu niño que ¡tendrá un día divertido! Ya sea para colorear, ver una película o jugar, recuérdale que cuando llegue su nueva amiga, va a hacer su actividad favorita. Esto le da a la niñera y a tu niño algo en lo que concentrarse después de tu partida.
5. Siempre di adiós y no te quedes.
Tanto con los bebés como con los niños pequeños, es importante decir adiós cuando sea el momento de irse. Escabullirse de la casa da la impresión de que algo va mal. Incluso si se anticipan las lágrimas o una rabieta, tu niño necesita saber que te vas y que volverás. Los actos de desaparición pueden hacer que los pequeños se sientan temerosos y confundidos. Además, tu niño podría empezar a asumir que tú te escabulles de la casa cada vez que revisas el correo. Decir adiós genera confianza, aunque puede ser difícil para ambos. También es importante que tengas confianza al irte. ¡Dale un gran abrazo! ¡Compartan algo de amor! Y traten de no mirar atrás. Puede ser más difícil para tu niño y para la niñera si muestras dudas o te demoras cuando estás tratando de irte.
Ayudar a los niños a construir una relación con un nuevo cuidador es una parte saludable del crecimiento y les enseña que las personas fuera de su círculo familiar también pueden quererlos y cuidarlos.